“Un buen embalaje garantiza que el corazón puesto por el diseñador
en su producto, no vaya a terminar roto en mil pedazos”
Es tradicional que la prioridad en las áreas creativas de las empresas esté orientada a lograr que sus productos estén llenos de atributos y virtudes que satisfagan las necesidades de los consumidores, logrando abrirse un espacio en el competido mercado y en el corazón del cliente final. Ello es totalmente acertado.